El oráculo de su mundo en como una Ceiba gigante. Por eso los lectores de la narrativa creada por Rubén Rodríguez González beben la savia de su fuente literaria.
Como una alborada del nuevo siglo y del nuevo milenio en un instante fecundo para la narrativa, un joven escritor, periodista de profesión ha sabido explorar diferentes zonas de la realidad, acumular vivencias que puede llevar a la literatura con humor o agudeza, sin renunciar a ofrecer un cuadro de la realidad y variados conflictos en las relaciones humanas.
Empezó a escribir a los 30 años. Tiene publicados varios títulos, entre ellos, el cuaderno de cuentos Eros del espejo (Ediciones Holguín 2001); la novela Majá no pare caballo (Ediciones Holguín 2003); así como las novelas para niños Mimundo (Editorial Oriente, 2006), El Garrancho de Garabulla (Ediciones Holguín 2006) y Paca Chacón y la Educación Moderna (Editorial Oriente, 2008). Otros títulos para adultos son Gusanos de seda (novela) y La madrugada no tiene corazón (Ediciones Loynaz, 2006).
Peligrosos prados verdes con vaquitas blanquinegras, es un libro que presenta humorísticos cuentos con diversas temáticas relacionadas con la amistad, el amor, en las cuales siempre encontramos una profunda enseñanza.
Evocaciones de circunstancias, elementos de textos clásicos de la literatura universal, ambientes nombrados de acuerdo con su esencia y función dentro de la historia aportan un sello especial a su discurso.
Sin dudas, en la narrativa de este autor lo real se contamina con lo fantástico en un espacio en que los fenómenos paranormales suscitados están en la imaginación, como flotando en las cosas que vemos y sentimos. |
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